El frasco de reactivo, también conocido como frasco de medio de cultivo o frasco de báscula, es un recipiente fabricado en vidrio, borosilicato o sustancias afines, con una tapa especial en la parte superior. Están diseñados para contener productos químicos en forma líquida o en polvo para uso en laboratorio y se almacenan en armarios o estanterías. Algunas botellas de reactivos son de color ámbar (fotoquímico), marrón o rojo para proteger los compuestos fotosensibles de la radiación visible, ultravioleta e infrarroja, que puede alterarlos; Las botellas se denominan "clasificadas" cuando están marcadas en el costado para indicar la cantidad aproximada (generalmente con un error del 10%) de líquido en un nivel determinado en el recipiente. La botella de reactivo es un tipo de cristalería de laboratorio.